miércoles, 14 de septiembre de 2011

¿COMO PODÉIS UTILIZAR LA BIBLIOTECA EN ESTE CURSO?


  • Tomando en préstamo sus libros. Hasta dos ejemplares durante quince días. Si necesitáis más tiempo los volvéis a retirar. El préstamo os lo harán vuestros tutores, en principio, a partir de octubre.
  • Participando en este blog con vuestros comentarios, dibujos, escritos originales, resúmenes de libros que os hayan gustado, etc. Podéis entregarlos en vuestra clase o en la biblioteca si los habéis hecho sobre papel. O enviarlos a ceipfayala6a@gmail.com. si son digitales.  
  • Leyendo on line a través de los enlaces del blog que se irán publicando.
  • Conociendo las recomendaciones de lectura que hay en varios de los enlaces ya publicados.
  • En ellos también podéis encontrar consejos para escribir mejor.
  • De cualquier otra forma que se os ocurra, siempre que la deis a conocer primero a vuestros tutores.

viernes, 9 de septiembre de 2011

LA SOSPECHA (Anónimo de China)

Un hombre perdió su hacha y sospechó del hijo de su vecino. Observó la manera de caminar del muchacho: exactamente como un ladrón. Observó la expresión del joven: como la de un ladrón. Observó también su forma de hablar: igual a la de un ladrón. En fin, todos sus gestos y acciones lo denunciaban culpable del hurto.
Pero más tarde encontró su hacha en un valle. Y después, cuando volvió a ver al hijo de su vecino, todos los gestos y acciones del muchacho parecían muy diferentes de los de un ladrón.
FIN

miércoles, 7 de septiembre de 2011

La salvación


[Cuento. Texto completo]
Adolfo Bioy Casares
Ésta es una historia de tiempos y de reinos pretéritos. El escultor paseaba con el tirano por los jardines del palacio. Más allá del laberinto para los extranjeros ilustres, en el extremo de la alameda de los filósofos decapitados, el escultor presentó su última obra: una náyade que era una fuente. Mientras abundaba en explicaciones técnicas y disfrutaba de la embriaguez del triunfo, el artista advirtió en el hermoso rostro de su protector una sombra amenazadora. Comprendió la causa. "¿Cómo un ser tan ínfimo" -sin duda estaba pensando el tirano- "es capaz de lo que yo, pastor de pueblos, soy incapaz?" Entonces un pájaro, que bebía en la fuente, huyó alborozado por el aire y el escultor discurrió la idea que lo salvaría. "Por humildes que sean" -dijo indicando al pájaro- "hay que reconocer que vuelan mejor que nosotros".
FIN